Durante décadas, los corazones infectados con hepatitis C a menudo se descartaron. Investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Pennsylvania (Estados Unidos) han curado a nueve pacientes del virus de la hepatitis C (VHC) después de haberles realizado un trasplante de corazón de donantes que murieron infectados por la enfermedad. De esta forma, han demostrado que este trasplante desde donantes infectados no es perjudicial para los infectados siempre que se usen los nuevos tratamientos antivirales.
“Durante décadas, los corazones infectados con hepatitis C a menudo se descartaron, y se demostró que las pocas personas que recibieron estos órganos tenían una tasa de supervivencia significativamente menor. Nuestro ensayo proporciona evidencia nueva para demostrar que los nuevos tratamientos antivirales para el VHC funcionan bien en pacientes inmunodeprimidos”, explica Peter Reese, uno de los líderes del estudio, que se ha publicado en la revista American Journal of Transplantation.
En 2017, este grupo de investigación lanzó un ensayo clínico para probar el efecto del trasplante de corazones de donantes con VHC a pacientes en la lista de espera de trasplantes que no tienen el virus. Los investigadores modelaron el ensayo clínico, conocido como ‘USHER’, después de un innovador estudio que involucró el trasplante de riñones infectados por el VHC (conocido como ‘THINKER’), y luego tratar a los receptores con una terapia antiviral para erradicar el virus después del trasplante. En ambos estudios, todos los pacientes que completaron el régimen de terapia antiviral se curaron de su VHC contraído.
Reese inscribió a candidatos que se enfrentaron a tiempos de espera prolongados por una variedad de factores, incluida la insuficiencia cardíaca, a menudo hasta cinco, siete, incluso diez años. El equipo utilizó criterios específicos para evaluar los órganos disponibles, incluida una restricción de genotipo destinada a minimizar el riesgo.
Entre junio de 2017 y abril de 2018, 10 pacientes recibieron trasplantes utilizando el protocolo. Tres días después de la cirugía, los pacientes fueron evaluados para el VHC y los 10 dieron positivo. Después, el equipo de investigación trató a los participantes con un tratamiento de 12 semanas de elbasvir/grazoprevir, conocido comercialmente como ‘Zepatier’, un medicamento oral altamente efectivo para tratar el VHC.
Los 10 pacientes respondieron rápidamente a la terapia antiviral. Si bien la presencia de VHC y el uso de terapia antiviral no causaron ningún evento adverso, un paciente falleció debido a complicaciones de rechazo a anticuerpos en los primeros tres meses después del trasplante. Los otros nueve participantes se han curado de su VHC y han informado de una buena calidad de vida después del trasplante.
Recientemente, este equipo de investigación ha lanzado un nuevo ensayo clínico que estudiará este mismo enfoque en pacientes que esperan un trasplante de pulmón. Los investigadores señalan que existe la necesidad de ensayos más largos y más extensos para continuar evaluando la efectividad del trasplante de VHC positivo a VHC negativo seguido de terapia antiviral en una población más amplia.
Fuente: tribunavalladolid.com